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Escrito por Ulises Gamonal Guevara   
Viernes, 07 de Septiembre de 2007 13:25
En 1976, Walter Alarcón Dávila, joven docente, iniciaba sus labores en el Casero "Faical", más conocido como "Tablones", hacía llegar para Facetas, un interesante artículo sobre la existencia del ARTE RUPESTRE EN SU COMUNIDAD! La noticia rebasaba lo ordinario, no eran exclusivas las pinturas clásicas de Lauricocha y Toquepala, existía el Arte Rupestre en otros lugares del Perú en especial en la región amazónica donde vivimos. Describía con gran precisión todo lo referido a las pictografías: ubicación, características, técnicas de elaboración, los dibujos más resaltantes y su iconografía que había podido captar en los grandes murales rupestres de la "Peña labrada". Con este artículo, Facetas se convertía en la primera revista de la zona en divulgar y valorar une de los más trascendentales testimonios del hombre precolombino que nos ha legado pintando o grabando en las rocas.



A invitación del ya fallecido joven José Ary Fernandez Sanchez a su comunidad para "conocer más pinturas en las peñas", viajamos a Lonya Grande, por entonces pertenecía a la provincia de Bagua y más tarde a la provincia de Utcubamba; en el trayecto a dicho pueblo, luego de pasar el caserío Malleta, continuamos la ruta hacia Lonya Grande, a 500 metros antes de lIegar al caserío Chinuna, observamos sobre la carretera como un techo natural enormes rocas donde se encontraban plasmadas pinturas rupestres de color naranja tipo grecas conocidas como la "Faja", posiblemente habían sido muchas, pero con la construcción de la carretera habían sido destruidas; impactados por estos hermosos pictogramas, luego de tomar apuntes y fotografías, continuamos nuestra ruta rumbo al pueblo de Chinuna, al pasar dicho caserío nos encontramos con otras enormes moles pétreas como farallones cerca de la carretera donde había un hermoso mural con pinturas zoomorfas, antropomorfas y otros símbolos de color ocre parecidos a cuentas, resaltaban una lIama, un extraño tótem tipo felino, una majestuosa serpiente reptando al infinito, hombres con los brazos abiertos en son de cacería, entre otros; estas hermosas pinturas aumentaban nuestra emoción; los vecinos informaron que caminando por ruta de herradura hacia la capital del distrito Yamón (hoy perteneciente a la provincia de Utcubamba), los desfiladeros estaban lIenos de pinturas. Seguimos la ruta a Lonya Grande, bajando el caserío Portachuelo, margen derecho del río Lonya, volvimos a encontrar nuevas e impactantes pictografías en el caserío lIamado "San Isidro", también estaban a filo de carretera, eran conocidas como el "Idulo"; el Idulo era un personaje flotante con muchos dedos, junto a figuras abstractas, luego encontramos a los "Danzantes", donde un jefe del grupo disfrazado con máscara de zorro coge de ambos lados de las manos a hombres desnudos que portan dagas y hondas en el éxtasis de la danza; los pobladores informaron que en el mismo cerro, en sus profundidades había pinturas más hermosas y las lIamaban las pinturas del cerro "El Quaco", de difícil acceso, si no se contaba con equipo especializado; así lo han confirmado en el presente año los arqueólogos Quirino Olivera y Wilmer Mondragón, que estuvieron a punta de morir rodando por los abismos.

Llegamos a Lonya Grande emocionados, los jóvenes de la comunidad se integraron a nuestro equipo y fueron los guías a las pictografías de Buenos Aires y petroglifos de Carachupa; a la primera impresión al observar en forma minuciosa los asentamientos y compararlos con el Arte Rupestre del Chinchipe, fuimos comprendiendo que las pinturas rupestres de Chinuna-Yamón-Lonya Grande eran de mayor antigüedad, veíamos gran similitud con el Arte Rupestre de Toquepala y Lauricocha; en el trayecto se tuvo la información de la existencia de inmensos murales de pictografías en el otro margen del Marañón en las confluencias con el río Silaco, distritos de Pién, Chimban (Chota), Cujillo y Santo Tomás (Cutervo).

De igual forma fuimos obteniendo informaciones de grabados y pictografías en Pomahuaca, Colasay, Chontali, cercado de Jaén; todo esto se complementaba con los notables hallazgos de Litoescultura de la Estela de Agua Azul o Chontali el ano 1981, el Gran Monolito de San José del Alto en 1982 y otros notables asentamientos de Arte Rupestre y Litoescultura en el Nor Oriente Peruano. La divulgaci6n en revistas y folletos de las pictografias y grabados, motivaron la presencia de estudiosos en Arqueologia, entre ellos Federico Kauffmann Doig, quien más ha divulgado y estudiado los asentamientos de Litoescultura en Agua AzulChontali y Pampas del Inca-San José del Alto, realizando intensa labor de difusión a nivel nacional e internacional, junto al Dr. Giancarlo Ligabue. También han publicado importantes artículos y comentarios sobre el Arte Rupestre en la zona, los arqueólogos: Alfonso Ramos, Alberto Bueno-Anzelmo Lozano, Alfredo Torero, Quirino Olivera, Jaime Miasta, Ruth Shady, Irma Gamboa y últimamente los científicos: Enrique Bautista (Colombia), Jean Guffroy (Francia), Francisco Valdez (Ecuador), Yoshio Onuki (Japón), entre otros.

Anhelamos que lo divulgado se integre gradualmente al Inventario Nacional de Arte Rupestre y sea tema de interés y discusión en los círculos académicos y se evite su exterminio por la nula tarea en conservación, el saqueo, la contaminación ambiental que se inicia por nosotros al destruir el habitat donde se encuentran las pictografías y grabados, o las desesperadas impostaciones de cierta gente que ve al patrimonio nacional como la gallinita de los huevos de oro, y no piensan que debemos cuidarlo y conservarlo como lo más sagrado de nuestra identidad, evitando que las pinturas o grabados sean manoseados, pintados o "aclarados" para fotografías o calcos, cada tizne con tiza equivale a 9.8 de acidez y los desechos de los animales tienen 5.9 de acidez (pH), (Bednarik 1979). AI tocar una expresión de Arte Rupestre, nuestras manos generan una grasa altamente nociva para la conservación de pinturas y grabados, asi lo demuestran científicos en la conservacién de las estalagmitas, cuando el hombre pone la mano sobre ellas éstas dejan de desarrollarse, se secan y mueren rápidamente.

Antes de la somera descripción del Arte Rupestre en la zona por motivos de espacio en Facetas, realizamos algunos planteamientos que es nuestro anhelo compartirlo con otros estudiosos:
  • El Arte Rupestre en la zona en gran parte es desconocido por el mundo científico.
  • El Arte Rupestre en Pictografías y Petroglifos de gran antigüedad se ubica en las cuencas del río Chunchuca (Hualatân Chontali) y en la confluencia de los ríos Silaco-Marañón-Lonya (Chiñuña- Yamén-Buenos Aires-Carachu pa-Calpón).
  • En la mayoría de pictografías se aprecia superposición de imágenes, indicándonos que fueron pintadas por diversas oleadas migratorias.
  • Los hombres nómadas que recorrieron la zona, al entrar en contacto con la rica flora, fauna, frutos silvestres, fertilidad en las tierras y abundancia de las aguas para el facil transporte, más la riqueza ictiológica que éstas encierran, permitieron ir creando una cultura sedentaria a base de la domesticacién de animales, la agricultura incipiente hasta lIegar a una avanzada; generaron el sedentarismo que lo evidencian las extraordinarias muestras en Iítica, metalurgia y cerámica.
Si bien las evidencias arquitectónicas no tienen la monumentalidad del Formativo andino o costeño, existen en la zona importantes restos arquitectónicos en: Tomependa, Turuku, plaza hundida de Magllanal, pirámides truncas de Montegrande, Huaca "San Isidro"; la gran fábrica de platos de piedra en Huayurco; la ciudadela de Ingatambo (Pomahuaca); complejo arquitectónico "El Coliseo" (Chontali); ruinas de "Los Gentiles" en Chirinos. Son evidencias de la Gran Cultura conocida como Formativo Amazónico del Alto Marañón.
  • El Arte Rupestre de los valles del Chunchuca y el de las confluencias del Silaco-Marañón, es muy antiguo, superaría los seis mil años.
  • El Arte Rupestre en la zona lo han practicado los pueblos ancestrales en diversas etapas de su evolución encontrándose: Arte Rupestre Pre Agrícola, Arcaico, Formativo, Tardío Colonial y la existencia de un posible Arte Rupestre Republicano.
  • El Arte Rupestre en la zona es une de los más abundantes del Perú, solamente en Faical existen más de 1600 pictografías, motivando al rupetrélogo colombiano Dr. Enrique Bautista considerarlo como el mural más extenso de Arte Rupestre en América Latina; esa misma apreciación merecerían los murales rupestres de Pongoya o Minchulay en Chimbân (margen izquierdo del río Marañón); lo consideramos uno de los más extensos murales de micropictografía rupestre de la región, sin omitir los notables paneles rupestres de los distritos: Yamón, Lonya Grande con sus asentamientos de Chinuiia-Yamén, Quaco, Buenos Aires, Portachuelo, San Isidro, Calpon, Limones.
  • La mayor abundancia de petroglifos en la zona se encuentra en los distritos de Colasay y Chontali (provincia de Jaén).
  • Existe abundante arte grabado en tacitas y grandes morteros tipo hormas en las orillas de los ríos, quebradas, puquiales y cumbres de los cerros en las provincias: Jaén y San Ignacio, objetos Iíticos elaborados por rozamiento conocidos por los naturales como "las hormas", que habrían sido elaborados especialmente para el culto al agua y la pluviomagia.
  • Las pictografías, grabados, morteros ceremoniales de piedra y tacitas serían expresiones de comunicación mnemotécnica que usaron los antiguos pobladores de la región; la población actual lo sigue utilizando como señales de peligro, culto, magia. Así se puede apreciar en las pictografías delldulo-Lonya Grande, durante la lIuvia el peñasco se viste de color ocre intenso, como sangre, nadie penetra en sus entrañas. El Idulo es un personaje antropomorfo confeccionado en parte de figuras geométricas, tiene 90 centímetros de tamaño, la cabeza está cubierta con una corona de varias diademas, parece ocultar el rostro con una máscara, en cada mano tiene once dedos, los pies parecen estar flotando y terminan en rayos tipo garras de felino, los brazos están abiertos como saludando la salida del Sol, junto al misterioso personaje se encuentra una serie de pictografías geométricas. En el caserío TInyayuc-Cutervo, se encuentra un montículo lIamado "Korio", en medio del peñasco está pintada una cruz andina de color ocre con lagrimeo permanente tipo sangre, quien se acerca allí, muere al instante. Las "Hormas" del Cerro Bolo en el caserío Los Alpes, distrito San José de Lourdes, es sagrado para los lugareños, sólo es visitado por los maestros de la Curandería.
  • Los petroglifos de Colasay, Peña Blanca, Pampa del Limén, Huanchama, Rumipampa y Guayacán, se ubican al filo del camino real y a su paso se convierten en lugares de adoración y peregrinaje.
  • El Arte Rupestre, está ligado a un Apu Protector o Huamani, a las vertientes o mayos, a las pacchas y las cochas; otros serían de homenaje y culto a los astros como los famosos espejos o tacitas, por lo general se ubican en lugares altos y vistosos al cosmos.
  • Los naturales siguen conociendo a estas pinturas y grabados con nombres ancestrales como "Quilucat" que proviene de la voz quechua Quilca que quiere decir escritura o grafía de los antepasados; en otros lugares los lIaman idulos o lugares mágicos para la hechicería, también los conocen como los gentiles o piedras del letrero. Un documento de reciente divulgación explica que la Nueva Constitución de Belgrano en Argentina durante el proceso de la Independencia fue divulgada en tres idiomas: Quechua, Aymara y "hasta enjeroglificos del Tiahuanaco..." (Katia Jibaja 2006).
  • Las tacitas o cupules, serían objetos mágicos de culto y veneración al agua o a la Pluviomagia: en la comunidad de la LimaLa Coipa, existe un petroglifo en la orilla de la quebrada, en épocas de verano está totalmente libre y se puede ver rutinariamente, en épocas de lIuvia con la crecida de la quebrada es totalmente cubierta la piedra donde se halla el grabado y por más creciente que haya nunca es movida la roca; eso mismo sucede con las tacitas de Las Hormas en el centro poblado Pariamarca, distrito de Querocoto (Facetas No. 54) y las tacitas u hormas que existen en los ríos: Chinchipe, Tabaconas, Chunchuca; cuando dichos ríos están bajos por el estío, se pueden ver normalmente las hormas en las orillas de los ríos, cuando crecen, las lIuvias los cubren totalmente para volver a aparecer en verano y nunca se mueven del lugar por más crecientes de las aguas. Otras tacitas, simbolizarían el culto a las lagunas o cochas, como el caso de las existentes en Hualatan-Chontali, cerca de las tacitas y hormas se aprecian residuos de lagunas, cada tacita por lo general representaría una laguna grande o pequeña en este caso.
  • El Arte Rupestre mobiliar está continuado por la Litoescultura que gradualmente fue reemplazando a las muestras movibles con esculturas más ceremoniales o mágicas como los morteros, y macro esculturas, trabajadas por lo general en granito y fedesfalto.
  • El Arte Rupestre es la expresión social de los pueblos desaparecidos del antiguo Perú plasmado en pinturas y grabados que testimonian su accionar en esta región durante millares de años.
  • El Arte Rupestre en la zona está sufriendo dos graves peligros: el primero, es el proceso acelerado de fenómenos geológicos ocasionando el derrumbe de las grandes rocas donde se ubican las pictografías, como el caso de los asentamientos de Yamón (Utcubamba) y San Martín (cercado de Jaén), es urgente un inventario oficial como testimonio del Arte Rupestre en esta región; las alteraciones c1imatológicas que sufre el planeta en los últimos tiempos aceleran la destrucción del agonizante Arte Rupestre; el segundo, es la destrucción acelerada del Arte Rupestre por el problema cultural debido a la depredación de su hábitat por el hombre con el fin de hacerlo asequibles a los visitantes, permitiendo que la radiación solar y la meteorización destruyan rápidamente los murales rupestres de pinturas y grabados como el caso de las zonas arqueológicas en Cerro Bolo, Faical en San Ignacio, los Petroglifos de Rumipampa y Guayacan en Colasay, Ninabamba en Pomahuaca.
  • El interés por hacer atractivos los lugares de Arte Rupestre, motivan que mucha gente inescrupulosa realice pintas o grabados en estos lugares, manoseen o los aclaran con esmalte, pinturas, crayolas, punzones o tizas, ocasionando graves alteraciones en su forma o en su composición química que aceleran su destrucción.
  • La existencia de "Tacitas" abundantes y "Hormas" en los contrafuertes rocosos de los ríos de la zona (turukos), más el hallazgo de crisoles, indicaria que dichos artefactos podrian haber sido utilizados como lavaderos de oro y serían los antecesores de los "pucos" que hasta la fecha lo siguen utilizando artesanalmente quienes se dedican a esta actividad.
Última actualización el Viernes, 25 de Junio de 2010 08:49
 

Comentarios  

 
#2 Guest 24-08-2009 10:03
lauricocha
:lol:
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#1 Guest 24-08-2009 10:02
Prof.Gamonal:
Es muy interesante este artículo por cuanto amplía el horizonte del conocimiento de la cultura del Perú en esa etapa que sólo nos enseñaron de Toquepala y Lauricocha para el Lítico en el país.Bien, que se difunda más en videos y que llegue a los millones de escolares del paìs y no solo quede en la élite de arquéologos y expertos. Le cuento, que en Tumbes en una Feria de esas tantas y muy buenas que organiza CONYTEC llegó en el 2007 un profesor desde Bongará con preciosuras sobre el arte rupestre de esa zona , quedé sorprendido al explicar con mucha lógica en unos grabados del ciclo lunar y muchas cosas impresionantes como seres deformes o supuestos extra terrestres.Exitos en el III SINAR e inviten a la prensa para conocer mejor su desarrollo o divulgar resultados por este medio.
Gracias
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